Pollo estofado

Os lo digo a menudo, pero es que sigue siendo cierto: me encantan estas recetas con sabores que se marinan durante la noche y que después se hacen lentamente….

Ingredientes (4 personas):

2 c/c orégano seco
½ c/c pimienta
2 c/s harissa
Una pizca de hebras de azafrán
8 contramuslos de pollo, con hueso y piel, hacer 3-4 cortes
60 g harina (o harina de garbanzos)
2 c/s aceite
1 cebolla (200 g), cortada en aros
2 c/c jengibre fresco rallado
400 ml caldo de pollo
400 g tomates en lata
3 c/s puré de tomate
1 cabeza de ajos, cortada por la mitad horizontalmente

Preparación:

Mezclar el orégano, la pimienta, la harissa y el azafrán. Cubrir bien el pollo y dejar reposar una noche en la nevera.

Al día siguiente, enharinar el pollo y dorar en una cazuela con una cucharada de aceite. Disponer en la olla de cocción lenta o si lo vais a hacer en cazuela, reservar aparte.

Con el resto del aceite, sofreír la cebolla 4-5 minutos, hasta que esté blanda. Agregar el puré de tomate, remover y añadir el jengibre, el caldo y los tomates. Remover, llevar a ebullición y verter sobre el pollo. Si lo hacéis en cazuela, en este punto lo agregáis a la cazuela.

Incorporar la cabeza de ajos y cocinar 6 horas a función baja. Si lo hacéis en cazuela, cocinar 2 horas a fuego bajo, o hasta que el pollo esté hecho.

Retirar el ajo, aplastar con un tenedor para la sacar la pulpa y mezclar con la salsa. Probar y salpimentar al gusto.

Sugerencia: se puede preparar también en el horno

Precaución para celíacos: importante comprobar que todos los ingredientes utilizados son sin gluten